1. Organiza tus Facturas y Comprobantes
La organización es tu mejor aliada. Desde principio de año, crea carpetas mensuales (digitales o físicas) para todas tus facturas de ingresos y gastos.
¿Qué debes guardar?
- Facturas de ventas: Todas las que emitas a tus clientes.
- Facturas de gastos deducibles: Gasolina, papelería, servicios profesionales, etc.
- Comprobantes de pago: Estados de cuenta bancarios que demuestren las transacciones.
2. Revisa tus Deducciones Personales
Muchas personas pierden dinero por no conocer todas las deducciones personales a las que tienen derecho. Algunas de las más comunes son:
- Honorarios médicos, dentales y gastos hospitalarios.
- Colegiaturas (con sus respectivos límites).
- Aportaciones a tu plan de retiro (PPR).
3. No Esperes al Último Momento
El SAT suele tener intermitencias en su portal durante los últimos días de abril. Presentar tu declaración en los primeros días te evitará estrés técnico y te permitirá recibir tu saldo a favor (si lo tienes) mucho más rápido.
En Contafin, podemos ayudarte a revisar tu situación y optimizar tu declaración. ¡Contáctanos!